En cualquier relación , ya sea de amistad, sentimental, familiar o de otro tipo, pueden surgir desacuerdos, malentendidos o conflictos, ya que no todos somos iguales ni tenemos la misma forma de ser o de pensar.
A continuación, os compartimos una serie de recomendaciones para abordar cualquier mediación o intercambio de opiniones para intentar resolver el conflicto mediante el diálogo:
1. GENERALES
No divagues: Aborda un problema cada vez.
Resume el contenido del mensaje del otro antes de hablar tú.
Habla únicamente de lo que se puede observar, sin caer en “leer el pensamiento” del otro.
Prioriza mantener una actitud neutral, antes que negativa (no caigas en las exigencias, amenazas, humillaciones...).
2. CÓMO PLANTEAR EL PROBLEMA
Empieza transmitiendo un comentario positivo, ya que marcará el tono emocional del encuentro.
Procura ser específico y concreto:
Sed breves:
No revises todos los ejemplos pasados.
Evita preguntas del tipo «¿por qué?».
3. RESOLUCIÓN Y ACUERDOS
Focalización en soluciones: “Torbellinos de ideas”/brainstorming:
Pensad en soluciones.
Evaluarlas.
Promover el cambio mutuo.
Llegad a acuerdos:
Específicos y claros, con la mínima posibilidad de interpretación.
Incluyendo facilitadores para recordar su cumplimiento.
Que Sean por escrito ( revisables y determinad también el sistema y fecha de revisión).
Recuerda que no tienes enfrente a un enemigo sino a alguien con quien quieres mejorar tu relación y tu forma de comunicarte.
Fuente: “Repartirse el desamor”, José Cáceres Carrasco , BIBLIOTECA NUEVA,S.L (1 junio 2013)
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